Gonorrea

La gente me pregunta por qué no escribo más en el blog. Y me dan ganas de contestar, pero más que con palabras, con un abrazo largo y respiratorio.
Descubrir que aquella del olor a axila profunda soy yo y no vos.
Descentralizar los sueños y multiplicarlos en breves intervalos de bostezos en alquel colchón mugriento.
Un chico tímido, una perrita. Todos los gatos del mundo y el titileo de la música a tus pies.
Spinetta suena mientras todos tejemos y hacemos la producción inherente a un jipi. Todos comemos arepas, nos queremos y reímos, a veces cantamos y otras fumamos, pero las dos cosas a la vez, jamás. Mentira. Siempre.
Y yo te sigo extrañando, hoy más que nunca. Por qué? porque estyo a 13 mil km de distancia y soy una gonorrea, como dirían los parceros colombianos.