Jah love (protect us)

Me doy cuenta de la permeabilidad de mi piel para con ciertos acontecimientos y actitudes ajenas que se deben a la histeria generalizada de fin de año. Qué fin de año? Definitivamente, para mi no hay ningún fin de año, ningún año nuevo. Por qué? Porque no cursé en la fac, tons, no "pasé de año", porque aprendí maya y mi año nuevo a partir de hace un tiempito será el 26 de julio y porque simplemente veo a enero como una transición cordobesa con gente que amo, en lugares que me harán bien, con aire, cielo, naturaleza y silencio.
Ayer fui al centro.
No te puedo explicar la cantidad de gente que había, si queres saberlo, andá vos al centro, o imaginatelo. Un asco la gente. Y ningún esmalte de uñas violeta opaco que me satisfaga. La cola del fucking lugar posmo para comprar pilas recargables me hixo reir tanto que hasta pensé en madrugar el sábado para comprarlas sin que haya tanta gentehormiga queriendo pagar sus cds de arjona y otros pelotudos al volante. Es lo único que necesito comprarme y sólo venden las pilas buenas ahí, podés creer cómo el monopolio te toca el culo a cada instante?
Pero no es una tocada de culo linda, de esas que viene cuando estás tranzando y te hace cosquillitas, no. No. El monopolio es un tipo maleducado que pasa caminando y te toca el culo creyendo que tiene algún tipo de poder sobre tu cuerpo, por el sólo hecho de que vos tenés concha y el pija. Es un flor de hijo de puta. Pero allá él, vos y yo sabemos que ninguna de esas actitudes que el cree muy de macho lo van a llevar a ganarse ninguna mina y mucho menos paz interior, terminará solo en su casa, haciéndose la paja con alguna porno argentina de presupuesto barato.
También me queda elegir un libro. Quiero alguno de una mujer copada, de esas que me gustaría haber amado. O me confrmaré con alguno que me de ganas de leer en el momento de verlo. ya ni sé, sólo quiero ir hoy a Rayuela y quedarme un buen rato chusmeando páginas y aprovechando para ver libros de fotografía, de esos que traen las fotos bien grandes y que son caros y que jamás tendré, no porque no (si me vas a morder te bajo, le digo a Marla) pueda, quizás algún día si pueda, más bien porque preferiría tener las fotos en mi pared y no en un libro cerrado. Ayer fui a El Aleph (viste que todas las librerías se llaman igual?), pero ahí nunca tienen nada. No quiero otro de Saramago, para eso le pido prestado alguno a mi madre querida.
El broche de ayer fue la feria americana de diagonal 80. Las dos viejas medio tránfugas, la rubia más que la morocha. Mucha ropa nueva, los cinco pesos que me descontó la morocha y mi lista de compras re copada: remera roja, remera rayada negra que tenog que coser en una de las axilas (se dice sisa!), camiseta negra, musculocita azul con pintitas blancas y broderí en las mangas (una ternura), short cuasi pollera pantalón lila cuadrillé (toda la onda para usarlo con medias o calzas abajo) y un vestido de vieja estampado marrón que re da, pero RE da para usarlo como tapadito, ya que mi tapadito verde está falleciendo lentamente. Ah, el viernes fui a un velorio, pero por suerte me quedé poco y después Yuyo elogió los contraste de mi foto y el primer plano.
Y mientras, soy feliz porque cada día falta menos para: irnos a Córdoba, y mucho menos para: ir a tu casita el miércoles (mañana!)









^^ toda tonta.