20.8.09

Lo ilegal no es un límite para mí

A veces, lo mejor es callar. Ultimamente, siempre. No callar con la boca.
Callar con los dedos.
Metértelos bien adentro así no se escucha su voz.
Bien adentro de donde quieras.
Del agujero que mejor de caiga.
Pero probá todos.
Asi decidís con propiedad y sabiendo que cositas descartás.
Y está bueno, porque siempre que te metes un dedo en un agujero, siempre algo sale.
Nunca sale solo, nunca soledad.

2 comentarios:

mamaESTApresa dijo...

buuu... y yo queria comentar los altos poemas de la mom..

Blogger Pechocho dijo...

La Bukowski de la pampa... A wevo!