20.2.09

Camilo y abeja

Camilo come una abeja muerta, de esas que entran de vez en cuando por la ventana, porque abajo (abejo), en un patio lleno de baldosas y ropa colgada, hay un apicultor que juega a ser astronauta y a ser alijileño.
No me gustan las abejas, las mato con Raid para polillas, y Camilo se las come condimentadas, luego de verlas morir despacito, agonizando y haciendo ruido con sus alas tocando la madera o el papel blanco de la lámpara.

El mate matutino me hace cagar de calor, pero no puedo dejarlo. Si no baja la temperatura, me voy a matar, lo juro, dios. Lo juro por el puto calentamiento global y por la yerba quemada y la hierba que te deja quemada y la que fumas mientras te quemas las yemas de los dedos de la reconchadelalora.
La vida es puta.
Hoy quiero ir a trabajar menos que ayer.

4 comentarios:

Y. dijo...

La vida, sí, es muy puta.
:**

Limada dijo...

Una vida con hierba y yerba no puedo imaginarmela tan puta.
Tu blog dice bastante de mi, hace que me guste mucho.

Pi dijo...

me gusta la referencia herbática...

frío para tí,

Jorchu dijo...

mmm, vos elegís quemarte en todas, tenelo en cuenta... :P